Gualberto José Ibarreto Barrios nació en El Pilar, población del estado Sucre, donde aflora su gusto y pasión por el canto y la música, interpretando en la escuela y lugares públicos temas como El Chiriguare, El Carite y otras piezas del repertorio folclórico oriental.
Como estudiante universitario Gualberto
Ibarreto recorre los auditorios, llevando no sólo polos, malagueñas y galerones
de su Sucre natal sino música de protesta, trova cubana y temas suramericanos
de cantores como Mercedes Sosa, Atahualpa Yupanqui e Violeta Parra.
En esta época conoce a Kiko Contreras,
productor discográfico que lo lleva al sello Promus su primera casa de discos y
junto a Enrique Hidalgo realiza la voz y cuatro de una placa musical.
En Mérida Gualberto disfruta dando
serenatas, pero como violinista mientras sus amigos cantaban.
En los años 70s la moda consistía en
vestir estrafalario y llevar una larga cabellera, entre la salsa y el rock de
entonces sonaba una canción: María
Antonia.
Entre las noticias de la época estaba su
relación sentimental con una animadora de radio y televisión. La exposición
ante la opinión pública de esta relación lo hizo recaer en su superada adicción
al aguardiente, rehabilitación que hizo en Cuba hace más de 25 años.
Sin lugar a dudas la relación entre el
poeta Luis Mariano Rivera y Gualberto Ibarreto fue mágica. El verso de Luis Mariano
parecía hecho para la mixtura-textura de Gualberto, es la unión de poesía y voz
de dos hombres de pueblo que dan rienda suelta a la canta sin dueño. Luis
mariano Rivera fue el creador del poema Canchunchun
Florido, que ha sido interpretado por excelentes cantoras y cantores de
Venezuela y la Patria Grande.
Cuando Gualberto, El Pichón, resurge con la canción El Ladrón de tu amor tema
principal de la telenovela Leonela, el éxito no se hace esperar no sólo en
nuestro país sino en toda Latinoamérica, incluyendo la República Argentina
donde es requerido de inmediato para cumplir compromisos. En este país del sur
del continente esperaban la llegada de un dúo y tuvo que explicar más de una
vez que El Pichón Gualberto Ibarreto
era una sola persona.
Amor
compartido
Gualberto es un amor compartido, ejemplo
de ello es el músico cuatrista Jorge Glemm quien para la comparsa de carnaval
no pedía el disfraz de El Zorro o Superman, el sólo quería franela a rayas
sombrero de paja alpargatas y cuatro, el niño disfrutaba ser Gualberto.
Otros amores musicales de Gualberto
Ibarreto son Graterolacho, Enrique Hidalgo, el Pollo Sifontes, Rafael Salazar,
los músicos Javier y Pedro Marín y su infaltable Williams García.
Está unido sentimentalmente a Berta García,
fruto de ese amor surgieron dos hijos Cruz María y Elena.
Trayectoria
Durante su trayectoria trabajó con otros
sellos discográficos, entre ellos Velvet, Comusa y Sonográfica. Además, el
cantor oriental se hizo merecedor de la mayoría de los premios que otorga el
espectáculo en Venezuela.
Gualberto Ibarreto vivió muchos años en Caracas,
en la urbanización Los Palos Grandes. Son recordadas las tertulias en la panadería de las múltiples esquinas
con Simón Díaz, Iván Pérez Rossi y tantos amigos que lo frecuentaban en este
lugar, al que bautizaron la oficina de
Gualberto.
En
la actualidad
Regresa a Maturín a buscar sus aires
orientales, donde esta residenciado actualmente.
Gualberto no para, pues está cocinando,
junto a Williams García, temas como Todo
este campo es mío, de Simón Díaz,
dos canciones inéditas de Enrique Hidalgo y una canción de Armando Manzanero.
Una anécdota final: en la presentación
del disco junto a C4trio alguien le gasto una broma: ‘¿Gualberto, tienes
zapatos nuevos?’ y el respondió: ‘estos son los propios finos pa brincar
charcos’ y luego la preguntica: ‘cuánto te costaron?’ ¿50 GUALBERTOS?’
Gualberto Ibarreto es patria, pasión,
sentimiento, es una fruta madura.
¡Gracias Gualberto por ser la chispa y la
frescura del pueblo Venezolano!
Gualbertologas y Gualbertologos
Duvall Maldonado
Gualberto Ibarreto en PDVSA La Estancia
Texto: Duvall Maldonado
Fotografia Principal: Archivo Musical
Diagramacion: Javier A. Pérez.
Gualberto Ibarreto en PDVSA La Estancia
Texto: Duvall Maldonado
Fotografia Principal: Archivo Musical
Diagramacion: Javier A. Pérez.
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